martes, 28 de agosto de 2012

El triángulo evasor

 
“Hay decisión política para ir a fondo con la investigación y terminar con los abusos de los hombres de negocio del fútbol que administran a los jugadores y evaden impuestos”, declaró el titular de la Asociación Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Ricardo Echegaray, en una conferencia de prensa que brindó el último viernes. Lo hizo luego de anunciar el bloqueo de la Clave Única de Identificación Tributaria (CUIT) de 146 agentes económicos denunciados por evasión, fuga de capitales y lavado de dinero.
Según la página online de la Federación Internacional del Fútbol Asociación (FIFA), en la Argentina hay 217 representantes, de los cuales solamente el 71 por ciento se encuentra inscripto con CUIT en las bases de la AFIP. Entre los 146 intermediarios que el organismo estatal inhabilitó, figuran Juan Marcos Franchi (ex manager de Diego Armando Maradona y de Juan Román Riquelme), Gustavo Mascardi (ex gerenciador de Ferro) Diego Caniggia (hermano del pájaro), Fernando Hidalgo, Nazareno Marcollese, Carlos Aloisio, Marcelo Open (abogado del presidente de River, Daniel Alberto Passarella), Miguel Pires y Pablo Sabbag. Además, entre los bloqueados se hallan ex jugadores devenidos en empresarios, como Cristian Traverso, Carlos Mac Allister, Oscar Passet y Leonardo Rodríguez.
La AFIP detectó distintos mecanismos abusivos, siendo el más conocido la triangulación con clubes extranjeros con el fin de que ni el jugador, ni el representante ni el dueño de los derechos económicos paguen impuestos. Aunque el organismo tributario tomó la iniciativa de investigar ahora, esta manera de eludir impuestos no es ninguna novedad en el fútbol argentino. La gota que rebalsó el vaso fue la operación que tuvo como protagonista a Jonathan Bottinelli. A fines de junio terminó su vínculo con San Lorenzo, quedándose con el pase en su poder. River lo contrató pero no como jugador libre, ya que el transfer provino del club chileno Unión San Felipe. La institución que preside Passarella quedó en abonar 1.750.000 dólares por el 60% del pase, y se comprometió a embolsar otros 550.000 dólares por si el jugador llegase a disputar más de cinco partidos. Por esa razón, el organismo estatal bloqueó el envío del dinero, que estaba previsto a ser transferido a un banco de Miami.
A través de una resolución publicada el último viernes en el Boletín Oficial, la AFIP creó la Declaración Jurada Anticipada del Fútbol, con el objetivo de supervisar la compraventa de jugadores cuando intervenga una transferencia de divisas al exterior. Además, será el organismo responsable de autorizar el giro del dinero.
La triangulación es clave para el negocio de los representantes, ya que la ley prohíbe a las personas físicas ser dueñas de los derechos federativos. Es por eso que los empresarios buscan un club menor o fantasma para registrar a los futbolistas, contando con el necesario aval de estos últimos y de los dirigentes para que el negocio se concrete. Con este mecanismo también se puede ocultar el verdadero valor de la operación. Debido a la menor carga impositiva existente en Uruguay y Chile, la Argentina percibe menos ingresos por impuestos relacionados con las transferencias e impuesto a las ganancias. Por este motivo, Echegaray en la citada conferencia remarcó que “los jugadores y los clubes tienen la posibilidad de tomar la decisión correcta y mostrar la realidad económica de las operaciones”, advirtiéndoles a que se colocaran del lado de la ley, dejando de convalidar “operaciones tan grotescas de evasión fiscal”.
Algunas de las transacciones de jugadores que ya están bajo la lupa de la Justicia son las de Pablo Ledesma (Boca), Jonathan Botinelli (River), e Ignacio Piatti (San Lorenzo), quienes pasaron por Unión San Felipe de Chile; Santiago Vergini (Newell’s Old Boys), Daniel Stracqualursi (San Lorenzo), Oscar Ustari (Boca) y Emanuel Gigliotti (Colón), todos provenientes del Fénix de Uruguay; Román Martínez (Estudiantes), que llegó del Progreso uruguayo, y Víctor Zapata (Independiente), Jonathan Santana (Independiente) y Fernando Ortíz (Racing), quienes arribaron del equipo charrúa Institución Atlética Sud América. Los clubes se pusieron de acuerdo entre sí en no utilizar en la cuarta fecha del Torneo Apertura a ninguno de estos futbolistas.
Los equipos Unión San Felipe, Fénix, Progreso y Sud America, además de los uruguayos Bella Vista, Cerro, Rampla Juniors, Boston River; el chileno Deportivo Rangers, y el suizo Locorno, figuran bajo el rótulo de “paraísos fiscales deportivos”. Las transferencias que se realicen a través de alguno de estos clubes sufrirán una retención equivalente al pago del Impuesto a las Ganancias correspondiente.
Por su parte, Unión San Felipe, en un comunicado publicado en su sitio web, afirma que la institución “actúa con estricto apego al derecho común y deportivo, nacional e internacional y que no es un club fantasma que existe para justificar triangulaciones como parece querer presentársenos”. En relación a la inscripción de jugadores que ni siquiera actuaron allí, se aclaró que “es una práctica absolutamente lícita, ajustada a la legislación deportiva nacional y a las normas FIFA y es efectuada con estricto respeto por la legislación comercial y tributaria chilena”.
A todo esto, Julio Humberto Grondona declaró: "Siempre quisimos que haya claridad. La AFA está feliz de que esto suceda y que se revise todo. Yo hablé con el titular de la AFIP y le brindé los nombres de las personas que se dedican a la compra y venta de jugadores". Resulta extraño que el titular del ente que regula el fútbol argentino no estuviera al tanto de estas operaciones.
El deporte más popular del país, no conforme con sus múltiples casos de violencia, sumó un nuevo episodio escandaloso en su historia. No obstante, promete que haya más capítulos en los próximos días. Es sólo cuestión de esperar.  

jueves, 23 de agosto de 2012

A 200 años del Éxodo Jujeño


El 23 de agosto de 1812, hace exactamente 200 años, ocurrió el Éxodo Jujeño, bajo el mando del General Manuel Belgrano.

El episidio ocurrió a raíz de que el general en jefe, José Manuel de Goyeneche, luego de haber dominado en mayo de 1812 a los rebeldes de Cochabamba, se dispuso a ocupar las provincias "arribeñas" de la actual Argentina. Encargó esa misión a su primo Pío Tristán, quien el primero de agosto inició la campaña al mando de 2.000 soldados de infantería y 1.200 de caballería, con una artillería de 10 cañones.

Belgrano, al recibir la noticia de esa ofensiva, se dio cuenta de que resistir desde Jujuy era una empresa azarosa. Ideó entonces la estrategia de no dejar nada que pudiese aprovechar el enemigo. Por medio de un tremendo bando, publicado el 29 de julio, exhortó al pueblo: "Desde que puse el pie en vuestro suelo para hacerme cargo de vuestra defensa, en que se halla interesado el Excelentísimo Gobierno de las Provincias Unidas de la República del Río de la Plata, os he hablado con verdad. Siguiendo con ella os manifiesto que las armas de Abascal al mando de Goyeneche se acercan a Suipacha; y lo peor es que son llamados por los desnaturalizados que viven entre vosotros y que no pierden arbitrios para que nuestros sagrados derechos de libertad, propiedad y seguridad sean ultrajados y volváis a la esclavitud.

"Llegó pues la época en que manifestéis vuestro heroísmo y de que vengáis a reunirnos al Ejército de mi mando, si como aseguráis queréis ser libres, trayéndonos las armas de chispa, blanca y municiones que tengáis o podáis adquirir, y dando parte a la Justicia de los que las tuvieron y permanecieren indiferentes a vista del riesgo que os amenaza de perder no sólo vuestros derechos, sino las propiedades que tenéis.

"Hacendados: apresuraos a sacar vuestro ganado vacuno, caballares, mulares y lanares que haya en vuestras estancias, y al mismo tiempo vuestros charquis hacia el Tucumán, sin darme lugar a que tome providencias que os sean dolorosas, declarandóos además si no lo hicieseis traidores a la patria.

"Labradores: asegurad vuestras cosechas extrayéndolas para dicho punto, en la inteligencia de que no haciéndolo incurriréis en igual desgracia que aquellos.

"Comerciantes: no perdáis un momento en enfardelar vuestros efectos y remitirlos, e igualmente cuantos hubiere en vuestro poder de ajena pertenencia, pues no ejecutándolo sufriréis las penas que aquellos, y además serán quemados los efectos que se hallaren, sean en poder de quien fuere, y a quien pertenezcan.

"Entended todos que al que se encontrare fuera de las guardias avanzadas del ejército en todos los puntos en que las hay, o que intente pasar sin mi pasaporte será pasado por las armas inmediatamente, sin forma alguna de proceso. Que igual pena sufrirá aquel que por sus conversaciones o por hechos atentase contra la causa sagrada de la Patria, sea de la clase, estado o condición que fuese. Que los que inspirasen desaliento estén revestidos del carácter que estuviesen serán igualmente pasados por las armas con sólo lo deposición de dos testigos.

"Que serán tenidos por traidores a la patria todos los que a mi primera orden no estuvieran prontos a marchar y no lo efectúen con la mayor escrupulosidad, sean de la clase y condición que fuesen.

"No espero que haya uno solo que me dé lugar para poner en ejecución las referidas penas, pues los verdaderos hijos de la patria me prometo que se empeñarán en ayudarme, como amantes de tan digna madre, y los desnaturalizados obedecerán ciegamente y ocultarán sus inicuas intensiones. Más, si así no fuese, sabed que se acabaron las consideraciones de cualquier especie que sean, y que nada será bastante para que deje de cumplir cuanto dejo dispuesto."

Finalmente, el 23 de agosto de 1812 una inmensa columna de hombres, mujeres y niños, con sus pertenencias cargadas sobre los hombros o en carretas, y entre la polvareda del arreo de caballos, mulares y vacunos, empezó a marchar detrás de las tropas.

Esa enorme masa de población pasó por Salta, donde muchos otros se le unieron, para arribar en última instancia a Tucumán. Allí, Belgrano resolvió presentar batalla a los realistas, derrotándolos el 24 de septiembre. Meses después, el 20 de febrero de 1813, volvió a vencerlos en Salta.

Recién dos días después de la victoria de Salta, la capital jujeña dejó de estar bajo el poder de los realistas y se restableció el gobierno criollo. En el libro del Cabildo, de su puño y letra, Belgrano escribió: "Aquí concluye el Cabildo establecido por la Tiranía que fue repulsada, arrojada, aniquilada y destruida con la célebre y memorable victoria que obtuvieron las armas de la patria el 20 de febrero de 1813, siendo el primer soldado de ellas: Manuel Belgrano".