miércoles, 17 de agosto de 2011

El libertador



José Francisco de San Martín falleció en la tarde del 17 de agosto de 1850 en su casa situada en Boulogne-Sur-Mer, Francia, el 17 de agosto de 1850. Muy lejos de Yapeyú, ciudad de la provincia de Corrientes, lugar en donde nació el 25 de fe...brero de 1778. El "padre de la patria" vivió más tiempo en Europa que en la Argentina. A sus cortos cinco años, sus padres decidieron trasladarse a España. En 1789, cuando estallaba la Revolución Francesa, San Martín se incorporó como cadete al Regimiento de Infantería de Murcia.


Después de que se concretara la Revolución de Mayo de 1810, San Martín solicitó el retiro del ejército español para poder trasladarse a Londres y, desde allí, embarcarse hacia Buenos Aires, junto con otros 17 militares americanos con los cuales había militado. El 16 de marzo de 1812 el Triunvirato le concedió el grado de Teniente Coronel de Caballería.

Con la compañía de Carlos María de Alvear, fundó la Logia Lautaro, una organización secreta que se proponía luchar por la libertad de América. Por considerarlo impopular y centralista, participó en el derrocamiento del Primer Triunvirato ocurrido el 8 de octubre de 1812, hecho que provocó el aislamiento de por vida con Bernardino Rivadavia. Días más tarde, creó el Regimiento de Granaderos a Caballo, que tuvo su bautismo de fuego el 3 de febrero de 1813, triunfando en la batalla de San Lorenzo.

Tras la derrota de Napoleón, Fernando VII volvió al trono español y se propuso recuperar las colonias americanas. En ese entonces, San martín se reunió con Belgrano en la Posta de Yatasto (Salta) y se hizo cargo del Ejército del Norte. Junto con Tomás Guido, comenzó a preparar su plan continental que consistía en la liberación de Chile y Perú y finalizar con el poder realista en Lima.

Mientras tanto, Alvear creó en Buenos Aires el Directorio, un poder ejecutivo unipersonal, designando como primer director a su tío, Gervasio Posadas, quien nombra a San Martín gobernador de Cuyo. El Libertador en el cargo fomentó la educación, la industria y la agricultura.

Alvear, nombrado Director Supremo, en 1815 ofreció a Inglaterra el protectorado sobre la Provincias Unidas del Río de la Plata, iniciativa que todo el país rechazó. El Ejército se sublevó contra el Director, quien inmediatamente debió renunciar. Al San Martín romper relaciones con Alvear, la Logia se dividió entre los partidarios de uno y otro.

Cuando se declaró la Independencia el 9 de julio de 1816, San Martín obtuvo el apoyo de Juan Martín de Pueyrredón, director supremo de ese entonces, y asumió el cargo de General en Jefe del Ejército de Los Andes.

El 18 de enero el Ejército inició el cruce de la cordillera. Días después, sus hombres derrotaron a los realistas en Chacabuco. Un año más tarde, se proclamó la Independencia de Chile.

"Voy a dar la última respuesta a mis calumniadores: yo no puedo menos que comprometer mi existencia y mi honor por la causa de mi país; y sea cual fuere mi suerte en la campaña del Perú, probaré que desde que volví a mi patria, su independencia ha sido el único pensamiento que me ha ocupado y que no he tenido más ambición que la de merecer el odio de los ingratos y el aprecio de los hombres virtuosos", declaró José de San Martín antes de que la flota libertadora emprendiera viaje hacia Lima el 20 de agosto de 1820. A mediados de septiembre desembarcaron en el puerto peruano de Pisco y, finalmente, el 12 de julio de 1821 se declaró la Independencia de Perú y San Martín fue designado "protector del país andino". Allí, suprimió la esclavitud y la mita (sistema de trabajo por turnos).

Un año después se entrevistó con Simón Bolivar en Guayaquil (Ecuador) dejándole la conducción de la guerra. Regresó a Lima, donde renunció a todos los cargos y se dirigió a Chile, para luego trasladarse a Mendoza. El gobierno porteño, a través de Bernardino Rivadavia, le negó el permiso para instalarse en Buenos Aires para que se encontrara con su familia. El 1824, después de la muerte de su esposa Remedios de Escalada, decidió emigrar con su hija hacia Europa, donde vivió el resto de sus días.